lunes, 16 de julio de 2012

Asaltaban diciendo que acababan de salir de la cárcel


Por Oscar Alanya A.

Todos los días, como decenas de personas sin trabajo, José Luis Inga Timana y Richard Arenas Mamani se encontraban en el cercado de Arequipa buscando una forma de ganar dinero. Pero estos sujetos no trataban de ubicar un empleo temporal. Ellos buscaban a personas a las que pudieran asaltar y robar sus bienes. Para cometer sus crímenes, armados de trozos de vidrio roto u otra arma cortante, aseguraban a sus víctimas que acababan de salir del penal de Socabaya y que por lo tanto no tenían miedo de herir o matar.

Con esa modalidad, interceptaron al medio día del 13 de febrero en la cuadra tres de la calle San Martín del cercado de Arequipa a Edith Sarrano Vivar. La mujer, al oír a uno de los varones asegurarle que le cortarían la cara si intentaba correr, no opuso resistencia y obedeció.

Con un celular valorizado en trescientos nuevos soles, los individuos emprendieron la huída a pie hacía la avenida La Marina, lugar donde sus esperanzas de haber cometido el robo perfecto terminaron. Efectivos de Radio Patrulla les dieron alcance en esa vía luego de auxiliar a la mujer.
De acuerdo a las pesquisas realizadas por la fiscal Dra. Silvia Pinto, los individuos, aunque no tenían ingresos al penal de Socabaya como aseguraban, sí habían sido intervenidos en diversas ocasiones por su participación en diversos robos.

Desafortunadamente, debido a que en la mayoría de ocasiones las víctimas luego de recuperar sus bienes advertían no querer poner ninguna denuncia y ante la falta de evidencias en su contra, habían logrado evitar ser sometidos a procesados.

Sin embargo, en esta ocasión no lograron escapar de la ley y desde el 15 de febrero están internados en el penal a la espera del inicio del juicio oral en su contra que debería tener su primera audiencia la última semana de julio.

En la audiencia de control de acusación, la representante del Ministerio Público solicitó para José Luis Inga Timana y Richard Arenas Mamani un castigo de doce años de pena privativa de libertad por su participación en el delito de Robo Agravado.

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